Ricardo Diez
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| Enviado lunes, 26 de diciembre, 2005 - 10:58 am: | |
URGENTE 24 Cromañón, 1 año: "Lo que nos pasó es lo que somos” Desde el 24 hay actividad en Plaza Once por el aniversario de República Cromañón. Con el correr de las horas, sin duda esto crecerá hasta que marchen el viernes hasta la Catedral Metropolitana, donde el cardenal Jorge Bergoglio oficiará para familiares y amigos. Algunas reflexiones a tener en cuenta, en momentos muy delicados para Aníbal Ibarra y para su aliado político, Néstor Kirchner. Los familiares y los sobrevivientes del incendio del boliche de Once levantaron un santuario en el lugar de la tragedia en honor a las víctimas del siniestro. Además, armaron un árbol de Navidad con 194 estrellas y fotos. Ellos celebraron una Misa por Navidad para recordar a quienes ya no están. En un predio cedido por el ex ferrocarril Sarmiento, frente al denominado 'Santuario', en Once o Plaza Miserere, que recuerda a los 194 muertos de la tragedia de Cromañón, familiares y sobrevivientes asistieron a un oficio e inauguraron un mural con fotos de las víctimas. Un grupo de familiares montó también un árbol de Navidad con 194 estrellas e igual cantidad de fotos de las víctimas de la tragedia del 30 de diciembre del año pasado. Días atrás se presentó el libro 'Generación Cromañón', editado por La Vaca, en el que hablaron Diego Rozengart, hermano de Julián, una de las víctimas, y su madre Silvia Bignami. Y con su espíritu, los integrantes de la murga de sobrevivientes 'Los que nunca callarán'. Diego Rozengardt dijo ese día en el hotel Bauen: "Unos cinco o seis días después del 30 de diciembre, dos o tres días después del entierro de mi hermano, en una carta que mandé a mi familia y amigos, me salió firmar: “Lo que pasó es lo que somos”. Yo estaba terriblemente impresionado por el cuadro se situación que marcaba Cromañón, por la horrible combinación de Estado ausente y corrupto en todos sus niveles (policía, bomberos, funcionarios de todo rango), de ineptos, negligentes y codiciosos. De pirotecnia que encendió la mecha de la muerte y empresas off shore y empresarios que privilegian el bolsillo ante todo, aún ante la vida. (...) También, y además, ocurre de la mano de un empresario under muy conocido y de un grupo musical con letras combativas, cuestionadoras, antisistema. Ellos mostraron el modo de operar de este capitalismo salvajemente civilizado. Todo está calculado para la ganancia rápida y fácil, no importa otra cosa. Para eso hay que comprar la complicidad del policía, el inspector, el funcionario. Unos pagan la entrada al infierno y acaban allí dentro, otros se llevan la recaudación”. Son varios los grupos que se generaron a partir de Cromañón: > Asamblea 30 de diciembre, de El Palomar; > Que no se repita, > Juntos x la memoria, grupo de sobrevivientes, > Memoria y Justicia por nuestros pibes. Además, el arquitecto Raúl Morales, papá de Sofía, es uno de los inspiradores (junto a su esposa Adriana, también arquitecta) de la Plaza de la Memoria que se ha instalado junto a Cromañón. El psicólogo social y también arquitecto Alfredo Moffatt lidera la organización Bancavida y motorizó la construcción de otra Plaza de la Memoria en Isidro Casanova, con techo ignífugo (las estrellas) y puertas de máxima seguridad (no hay ninguna), construida por los propios sobrevivientes y que funciona como centro de reuniones barriales y recitales de rock y cumbia. Hay canciones dedicadas a Cromañón, como la de Marcelo Santillán (integra el grupo Familias por la vida), que se llama 'Basta ya', y la de Pichi, de Cabeza de Gorrión, 'Demasiada es la tristeza para olvidar'. En Once, la vigilia se prolongará hasta el viernes a las 17:00, cuando el cardenal Jorge Bergoglio oficie una misa en la Catedral Metropolitana, en conmemoración de las víctimas. Una de las madres de Cromañón destacó ante la prensa que el árbol quiere recordar a las "194 estrellas nuevas que hay en el cielo, que se fueron masacrados en una noche de calor por la corrupción de Aníbal Ibarra y el encubrimiento de Kirchner". En otro orden, el abogado Javier Miglino, sobreviviente y representante de un grupo de víctimas, presentará mañana en la Mesa de Entradas de la Legislatura porteña un proyecto para que el cuerpo "atienda en forma definitiva los reclamos de los sobrevivientes de la tragedia". Otra frase de Diego Rozengardt: "Los medios de comunicación han sido un caso aparte. En el primer momento mostrando escalofriantes imágenes, dando micrófono a quienes pedían mano dura y represión. El periodismo, con su genuflexión y lamebotismo basado en negocios, dinero y poder, siempre dispuesto a hacer operaciones de prensa, manipulando la información, presuponiendo un poderío inmenso para dirigir el pensamiento y la (in)acción popular. Tan difícil es escapar de ese cerco, pero cuanto más difícil más necesario. Primero quisieron callar los hechos y su trama y consecuencias; luego, al percibir imposible silenciar, inventaron noticias, encuestas tramposas, burdamente tergiversaron hechos, como no podían crear mantos de silencio hicieron ruido, ruido envenenado, ruido de amenazas, ruido mentiroso, y con tanto ruido números rojos en la cuenta del olvido. Pero con tanto ruido no escucharon el final. Cuando la hipocresía comienza a ser de muy mala calidad es hora de decir la verdad, dice Bertolt Brecht. Ellos aún no se enteraron. Lo mismo que el resto, se pusieron del otro lado. El mismo mundo Cromañón que contribuyen a crear y recrear, es el que defienden con uñas y dientes. Otra vez: lo que pasó es lo que somos. Luego, la indiferencia de mucha gente, el mirar para otro lado, el no compromiso, y hasta el ataque, la discriminación para con los sobrevivientes. Eso somos, eso creamos día a día". Una última frase de Diego: "Pero si lo que pasó es lo que somos, Cromañón nos enseña, también, desde lo innecesario y terrible de su matanza, que somos otras cosas. Que hay mucha gente de este lado. La noche del 30 de diciembre hubo decenas de chicos que entraron y salieron sacando amigos y desconocidos, algunos hasta dieron todo lo que tenían, dejando la vida en esa cámara de intoxicación, muriendo a cada momento un poco más, pero volviendo a entrar. Otros cientos, miles de personas esa noche se acercaron y ayudaron, dieron una mano, un abrazo, un vaso de agua. Brecht dice también: desgraciados los países que necesitan héroes. Este país los necesitó mucho antes –décadas antes- del 30 de diciembre, los necesitó durante y los necesita después. Brazo, cuerpo y cabeza pusieron tantos amigos y amigas. Entendiendo que todos somos sobrevivientes pero no queremos ser sobremurientes, que Cromañón nos pasó a todos, generación y país Cromañón, y que los derechos humanos se defienden de manera irrenunciable cada día de nuestra vida, hemos visto a trabajadores, estudiantes y amas de casa codo a codo en las marchas, en las reuniones, las misas, los proyectos concretados y los aún en carpeta. Hemos visto gente con poco que dar, y que da todo, otras madres con dolores parecidos, a los obreros de empresas recuperadas regalarnos afecto y apoyo, organismos y organizaciones que sumaron su experiencia, sobrevivientes y familiares llorando juntos y planeando juntos. Gente con ganas de componer una canción y tocarla, de abrir un debate, de acompañar el reclamo hasta hacerlo suyo propio. Han llegado músicos de bandas chicas, que no tienen dónde tocar, que vienen y suman y cantan y proponen. Y critican. Y dan una, dos manos. A la violencia de la muerte y la corrupción se le opone el reclamo de justicia y una convocatoria a la vida, por lo que no están y para quienes sí estamos". |